- Un vecino de O Pino, ante la falta de información oficial, crea un mapa de los sondeos de Atalaya Minning con cien perforaciones en fincas privadas y públicas. Los críticos con la mina, que este domingo convocan una manifestación, denuncian que son perforaciones ilegales en las que se abandonan residuos.
- En declaraciones a Galiciapress, la minera rebate estas acusaciones. "Hay multitud de jurisprudencia que indica la no exigencia de licencia municipal cuando se trata de sondeos de investigación poco profundos", argumenta.
Hace un año que comenzaron los sondeos de la empresa de la Mina de Touro en los ayuntamientos de la zona. Javier lo sabe, porque en el mes de mayo de 2017 una persona se le acercó y le pidió autorización para llevar a cabo una medición en su propiedad, que la empresa desbrozaría y arreglaría en contraprestación.
Sin embargo, no fue hasta el 2 y el 4 de octubre, cinco meses después, cuando se convocaron las primeras reuniones en Touro y O Pino con la promotora del proyecto, la sociedad Cobre San Rafael SL –sociedad gallega con un acuerdo con la multinacional Atalaya Mining-, para, según avanzaba el anuncio del consistorio, “explicar el proyecto y las dudas sobre la exploración de la mina”.
El plazo de alegaciones del plan, que comenzó su período de exposición pública en el mes de agosto, acababa el 6 de octubre.
Restos de sondeos fotografiados por el vecindario
Las vecinas de ambos municipios decidieron mitigar la desinformación institucional buscando por su cuenta qué era realmente lo que iba a pasar y formaron plataformas ciudadanas en contra de la mina. Javier tomó parte en la nueva lucha a la que se enfrentaban: cortó la relación con la empresa acerca de las exploraciones en su propiedad, se unió a las plataformas y, en ese tiempo, durante sus paseos por el monte, descubrió la cantidad de sondeos que se estaban llevando a cabo.
“Empecé a ver que había sacos, había escombros, había cemento, había muchos restos de los sondeos por el monte. Por las pistas, por fincas, cerca de regatos, cerca de manantiales”, cuenta. Javier se encontraba constantemente con residuos abandonados y máquinas atrancando los caminos por el monte, así que, entre noviembre y diciembre, ante la aparición de muestras de sondeos en pistas públicas, decidió crear un mapa con coordenadas de las pruebas de la minera en el ayuntamiento de O Pino.
Cuando hubo acabado de cartografiar la zona, entregó el mapa a los grupos municipales de la oposición, PSOE y BNG, para pedir explicaciones al gobierno popular.
El pleno municipal se celebró el pasado 8 de febrero, y el día 20 del mismo mes la empresa solicitó permiso para llevar a cabo cuatro sondeos. El mismo día, el arquitecto municipal de O Pino autorizó a Cobre San Rafael S.L a realizar las cuatro mediciones en un día y medio por un valor de 8.800€.
Apenas dos semanas después, el 6 de marzo, la empresa obtuvo el informe favorable del asesor jurídico, externo a la corporación municipal. Con ello , el 7 de marzo la empresa Atalaya Mining obtuvo la autorización para los cuatro sondeos solicitados en un tiempo record. Hay personas que llevan varios años esperando por licencias similares a la de la empresa, según cuenta el vecindario.
Extracto de la licencia municipal concedida a Cobre San Rafael para cuatro sondeos
El 18 de mayo Javier presentó ante el ayuntamiento el plano donde recogía alrededor de cien sondeos presuntamente ilegales llevados a cabo por la compañía antes de solicitar el permiso en febrero, además de una denuncia ante una patrulla de medioambiente, que decidió, según el vecino, actuar de oficio ante los sacos y escombros abandonados.
LAS EXPLICACIONES DE LA ADMINISTRACIÓN
A finales del mes de marzo, la plataforma contraria a la mina pidió explicaciones al alcalde de Touro, Ignacio Codesido, en pleno municipal. Ante la sorpresa (o no) de las personas asistentes, el popular rompió unos papeles que, según la oposición y Nós TV –medio que cubría el Pleno-, acababan de entregar vecinas y vecinos críticos con la explotación minera.
En la sesión, el regidor confirmó que la empresa no había pedido autorización para realizar el muestreo. Integrantes de la Plataforma Veciñal declararon entonces que no llegó a quedar claro si el ayuntamiento había iniciado un proceso sancionador a la empresa, aunque sí reconocieron que un técnico municipal se estaba encargando del asunto y había un expediente abierto tras la primera denuncia particular –contabilizaban casi 50 acusaciones particulares ya en marzo-.
Frente al mapa realizado por el vecino de O Pino que señalaba alrededor de 100 sondeos ilegales, en la reunión del municipio de Touro la plataforma identificó más de 360 muestreos sin licencia municipal.
"NO ES CIERTO QUE SE HAYAN HECHO SONDEOS ILEGALES"
La empresa, por su parte, ha negado que los sondeos se realizasen de forma ilegal. "No es cierto que se hayan hecho sondeos ilegales. La empresa contó con las autorizaciones necesarias emitidas por la administración competente que, según la Ley de Minas, es la Autoridad provincial minera en proyectos de investigación minera", ha declarado Cobre San Rafael S.L. a Galiciapress. Según la compañía, esto le otorga "el derecho a la investigación geológica, utilizando, entre otras, técnicas de perforación con sondeos".
Preguntada acerca de las acusaciones de abandonar sacos y escombros en las zonas de las exploraciones, la compañía ha declarado que "cada emplazamiento de sondeos se restaura perfectamente una vez acabado y no se deja el más mínimo resto en la zona". "Esto se puede comprobar en los múltiples emplazamientos que se realizaron históricamente", apunta.
De otra banda, desde Cobre San Rafael S.L. sostienen que el impacto medioambiental de las mediciones es "cero". Niegan rotundamente que produzcan cualquier tipo de contaminación, ya que no utiliza productos contaminantes, y "se utilizan las mismas máquinas y métodos" que para realizar "sondeos y pozos de abastecimiento de agua", han concretado a este diario.
Sacos y escombros de los sondeos fotografiados por el vecindario
"Hay multitud de jurisprudencia que indica la no exigencia de licencia municipal cuando se trata de sondeos de investigación poco profundos. Estas pequeñas obras no tienen afección urbanística, que es el criterio que determina la necesidad de licencia municipal", declaran.
"A pesar de eso" y de "contar con la aprobación por parte de las autoridades mineras", la compañía, dicen, no tiene "ningún inconveniente" en pasar los trámites administrativos necesarios, "por lo que se decidió hacer la solicitud de licencia municipal de obra menor" , aclaran a Galiciapress.