Los grupos de la oposición en el Parlamento gallego, En Marea, PSdeG y BNG, ven "un antes y un después" en la manifestación del domingo en Santiago contra la reforma de Ley de Salud de Galicia , por lo que han pedido al PP que "escuche el clamor popular" y se siente a negociar.
Este lunes, los portavoces de la oposición en la Cámara gallega han coincidido en apuntar que la "masiva" marcha del domingo por las calles de la capital gallega (en la que participaron unas 5.000 personas) marca "un punto de inflexión" que debería obligar al PP a reflexionar sobre la nueva ley, que inicia este martes su tramitación parlamentaria.
En concreto, el portavoz de En Marea, Luís Villares, ha señalado que la respuesta social a la "contrarreforma" de la Ley de Salud de Galicia supone un "nuevo fracaso" para el PP y "evidencia la pérdida de confianza en el Gobierno gallego en menos de un año y medio desde el inicio de la legislatura".
Así las cosas, tras apelar a la "unidad" como "clave" para proteger "el derecho a la salud", ha instado al Gobierno gallego a "retirar inmediatamente" la reforma de esta norma "como hizo con la Ley de Acuicultura" tras las protestas del sector. "Si no lo hace, la ciudadanía retirará a Feijóo", ha apostillado.
NO HACER "OÍDOS SORDOS"
Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista, Xoaquín Fernández Leiceaga, ha reclamado al Partido Popular y al Gobierno gallego que "recapaciten" y no hagan "oídos sordos" ante el "clamor" de la gente que participó en la protesta de este domingo en la capital gallega.
El dirigente socialista, que ha pedido la devolución de la reforma que este martes inicia su trámite parlamentario, ha considerado que la marcha muestra "la fortaleza de la querencia por unos servicios públicos de calidad" y ha instado al Gobierno gallego a "no esconder la realidad detrás de un ficción muy edulcorada".
Y es que, según ha incidido, la reforma que pretende llevar a cabo el PP "consolida una sanidad desigual en el territorio" al retirar el área sanitaria a los hospitales comarcales de O Salnés, A Mariña, Valedorras y Lemos.
"LICENCIA PARA LOS RECORTES"
En esta línea también se ha mostrado la portavoz nacional del BNG, quien ha avanzado que la formación frentista pedirá formalmente la retirada del punto del día del pleno de este martes en el que se debatirá la reforma sanitaria.
De este modo, el Bloque quiere que Feijóo "se siente a hablar con la sociedad porque es la primera obligación de un gobierno democrático", lo que ha contrapuesto a la actitud de un PP que, a su juicio, "confunde la mayoría absoluta con una licencia para los recortes y para la privatización y eso es usar los votos en contra de la ciudadanía".
Pontón ha incidido en que la reforma sanitaria supone "un ejemplo más" de la "agenda contra Galicia" que, dice, rige el gobierno de Feijóo al frente de la Xunta, ya que "no defiende el derecho a la salud de las personas sino los intereses de las empresas privadas".
RESPUESTA DEL PPDEG
Por su parte, el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha asegurado que lo que se modifica es "un número limitado" de artículos de la Ley de Salud. "Trata de mejorar el sistema desde un punto de vista de la gestión, de la organización, sin ninguna incidencia presupuestaria previsible", ha señalado.
Asimismo, ha replicado a la oposición que "los hospitales comarcales se verán reforzados" al "blindarse" su existencia por ley y ha asegurado que el PP comparte la "preocupación" por el mantenimiento de una sanidad "buena, pública" como la que "hay de acuerdo con los informes" que se conocen.
Por ello, ha lamentado que haya "quien pretende introducir elementos de desconfianza sobre una norma que, lejos de lo que se está diciendo, no trata de privatizar nada". "De hecho", ha añadido, "si se analiza los presupuestos de los diferentes años se ve que en el presupuesto de 2008 previsto para conciertos con la sanidad privada era más cantidad de la que hay hoy".
"Como tampoco es cierto que se vayan a cerrar los hospitales comarcales", ha insistido para destacar que la Xunta lleva invertidos en los últimos años casi 20 millones de euros para reforzar estas infraestructuras.