Un reciente estudio publicado en The Lancet Diabetes & Endocrinology ha encontrado que el consumo habitual de carne, especialmente carne procesada y roja no procesada, está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. La investigación, que analizó los datos de casi 2 millones de personas, refuerza la necesidad de revisar nuestra dieta.
Algunas investigaciones previas sugerían que la carne a la parrilla o ahumada puede aumentar el riesgo de cáncer de mama, pero el estudio actual es la primera prueba de que también influye en las probabilidades de supervivencia.