Suspendidos los paros parciales de los controles de seguridad en Alvedro

UGT se reúne por la tarde con Prosegur.

El sindicato UGT ha suspendido los paros parciales convocados por los vigilantes de seguridad en el aeropuerto de Alvedro a partir del 20 de agosto, tras una reunión con Eulen Seguridad celebrada en la jornada de esta mañana entre ambas partes.

Así lo ha informado a Europa Press el portavoz de la central sindical, Juan Carreira, tras concluir la reunión, a la que seguirá otra por la tarde, a partir de las 17,00 horas, en el aeropuerto de Santiago de Compostela con la empresa Prosegur.

El acuerdo, según ha informado el sindicato, incluye la suspensión de los paros en Alvedro hasta el 20 de septiembre con la condición de establecer un calendario de negociación con el comité de empresa durante el período de suspensión.

Asimismo, ha explicado que, entre los cinco puntos acordados, se ha establecido que mientras dure el período de suspensión se abonará una dieta cuando el personal realice nueve horas de turno por retrasos de vuelos.

FORMACIÓN

Además, la empresa se compromete "a proponer un calendario adecuado para realizar la formación de 2018". A ello, se suma "el abono de una dieta en esta nómina por los días en que coincidieron días de trabajo con formación durante el año pasado".

Por último, el acuerdo establece que "si en el período de suspensión se alcanzase un acuerdo el mismo debería ser ratificado por más del 50% de la plantilla", según ha informado el sindicato.

VALORACIÓN DE AENA

Tras el acuerdo alcanzado, fuentes de Aena han asegurado a Europa Press que han estado "muy involucrados" en el conflicto con el objetivo de intentar que las partes "se pusieran de acuerdo".

Antes de esta reunión, UGT había acusado a las empresas de pretender "vulnerar un derecho constitucional" de los trabajadores al establecer unos servicios mínimos del 95% en todos los horarios y turnos en A Coruña, y del 100%, en el caso de Prosegur.

Los vigilantes de seguridad de los aeropuertos de A Coruña y Santiago de Compostela habían convocado paros parciales a partir del próximo 20 de agosto, para denunciar la "precarización de las condiciones laborales" y un modelo de sector basado, según argumentaban, "en la competencia sobre precios".