El Área Metropolitana de Vigo queda constituída con bronca y abandono del PP

La asamblea del Área Metropolitana de Vigo se ha constituido formalmente este jueves en una sesión bronca, con constantes enfrentamientos entre los concejales del PP y los del PSOE por la integración de Vigo en el plan de transporte metropolitano de la Xunta, y que ha acabado con el abandono de la sala por parte de los representantes 'populares'.

El desarrollo del pleno ha estado condicionado desde el principio por la constitución de la mesa de edad, que ha presidido el alcalde de Salvaterra, Arturo Grandal (PP), cuando se daba por hecho que sería Abel Caballero. Así, el regidor de Salvaterra, en contra del criterio del secretario del pleno, ha permitido que se desarrollase un debate, al margen del orden del día, sobre el transporte metropolitano.

Precisamente, al respecto de esa cuestión, han sido las intervenciones de los representantes del PP en el pleno. Una vez que todos los asamblearios tomaron posesión y juraron o prometieron sus cargos, la primera en tomar la palabra fue la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, para reclamar que se suspendiese la sesión, ya que el Área no puede, a su juicio, ponerse en marcha sin que Vigo cumpla el requisito de integrarse de forma efectiva en el plan de transporte metropolitano de la Xunta.

A partir de ese momento, se produjo un intercambio de acusaciones entre representantes del PP y del PSOE sobre esta cuestión. Mientras que los populares han advertido de que, tal y como se ha creado el Área, los municipios "empezarán a retirarse"; los socialistas y otros asamblearios (como el alcalde de Cangas) han reclamado que el ente supramunicipal comience su andadura y que las discrepancias sobre el transporte metropolitano se diriman por la vía contencioso-administrativa, al tiempo que han denunciado la intención del PP de "boicotear" el Área.

"MANIOBRA DEL PP"

El debate subió de tono cuando los representantes del PP afearon a Caballero que no cumpliese con lo firmado en el convenio del transporte y la "falta de respeto" para el resto de municipios que "llevan más de un año" pagando por ese servicio.

A las críticas respondió el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Vigo, Carlos López Font, quien ha atribuido la actitud del PP a una "clara maniobra de obstrucción política" instigada por Alberto Núñez Feijóo y por Alfonso Rueda, y ha lamentado que los representantes 'populares' "no están a la altura de la responsabilidad" de formar parte de la asamblea metropolitana.

ABANDONO Y ELECCIÓN DEL PRESIDENTE

Tras el intenso intercambio de reproches, el presidente de la mesa de edad decidió que hubiera un receso para consultar con el secretario del pleno la continuación de la sesión pero, tras media hora, no se llegó a ningún acuerdo: Arturo Grandal quiso suspender el pleno, pero el secretario le advirtió de que no había "causa ni razón legal" para hacerlo, por lo que tanto el alcalde de Salvaterra como los representantes del PP abandonaron la sala.

Tras el incidente, Caballero sustituyó a Grandal en la mesa de edad y el pleno continuó con la presentación de su candidatura (la única que hubo) para presidir el Área. En su intervención, el alcalde de Vigo ha acusado al PP de "romper la democracia" y dar un "espectáculo lamentable".

"Lo que acaba de pasar es la muestra de la interferencia de Feióo y Rueda, que no quieren reconocer que tenemos un Área en la que ellos no son mayoría", ha denunciado, y ha advertido de que el Área Metropolitana "tirará para adelante" y "quiere ser autónoma". Asimismo, ha añadido que "el problema del transporte" se resolverá cuando se constituya el gobierno del ente supramunicipal.

Finalmente, Abel Caballero ha sido elegido presidente del Área con 28 votos favorables, los de los alcaldes y concejales del PSOE, BNG, Movemento Salceda, ACE-SON, Marea de Vigo, y GañaMos, que se quedaron en la sala; y un único voto en contra, el del representante de la Agrupación de Electores de Redondela.

En esta sesión constituyente del Área Metropolitana de Vigo han tomado posesión como asamblearios 51 alcaldes y concejales, de los 53 que forman este órgano. Dos de ellos no pudieron hacerlo, un concejal del PSOE de Gondomar y otro del BNG de Moaña, puesto que el secretario consideró que su designación no se hizo conforme a la normativa.